Empecemos con un texto de
interés: para todos aquellos que les gusta la radio y están hartos de escuchar
las mismas cosas estación tras estación, programas sin contenido, con
locutores presenta canciones… No me mal entiendan, me encanta escuchar la
radio, sin embargo, hay más cosas que podemos hacer o escuchar a través de este
medio; ejemplo de ello tenemos las producciones de RADIOARTE.
Para aquellos que no
conozcan qué es el radioarte les dejo algunas opiniones sobre este género sin
fronteras:
Iris Disse, realizadora alemana que
trabaja en la Radio Artística y Experimental de Quito, Ecuador: "el
principal trabajo del radioarte consiste en la apertura de oídos. Es un acto
que detiene las actividades cotidianas y te orilla a escuchar tu mundo
interior".
Jorge Gómez Aponte, radioasta venezolano:
"De esto se trata el Radioarte: programas de radio que a veces parecen
obras experimentales electroacústicas o, también, cine para los oidos".
"El radioarte es la ordenación estética del sonido transmitido por
radio".
Kurt Weill, artista alemán que, a finales
de la década de 1920, postulaba los principios del "radioarte
absoluto", exigía que "a las cadencias y ritmos de la música se
aunaran nuevos sonidos, los sonidos de otros ámbitos: las voces humanas y
animales, el canto de la naturaleza, el susurro de los vientos, del agua y de
los árboles, y luego un ejército de nuevos tonos inauditos que el micrófono
podría producir de manera artificial por medio de ondas sonoras aumentadas o
niveladas, superpuestas o mezcladas, disipadas y nuevamente concebidas".
René Farabet, artista francés del Athelier
Radiophonique de Paris: "El arte radiofónico es la concepción de un arte
de vida, que es movimiento, compromiso, transgresión, que no tiene que obedecer
a libros o a recetarios. No hay modelos, no hay moldes prefabricados típicos.
El arte está hecho para despertar conciencias, para desencadenarnos".
Janette El Haouli, radioasta brasileña: "El
interés del radio-arte radica en la posibilidad de construir una radio que
sirva para humanizar la experiencia estética, que pueda afectar nuestra
existencia, que produzca nuevas posibilidades de vida, nuevos modos de escucha
y de existencia y que pueda permanecer sensible al mundo del pensamiento y de
la acción, simultáneamente. El arte debe estar al servicio de la vida y darnos
valor para cambiar lo que sea posible cambiar.
Lidia Camacho, realizadora mexicana:
"El radio arte es una manifestación tan radical, que busca llevar a sus
últimas consecuencias las posibilidades del sonido, que intenta dislocar la
sintaxis de lo que hoy conocemos como discurso sonoro, que se enfrenta con
nuevas formas, nuevos significados y nuevos referentes al arte sonoro por
excelencia: la música. Cada obra de radio-arte es una búsqueda, pero también un
reencuentro: con el asombro, con lo inaudito, con todo lo que encierra el
sonido cuando se lo trata como materia estética".
Simon Elmes, realizador de la BBC:
"Lo que resulta mágico es el hecho mismo de que la identificación es en el
mejor de los casos imprecisa: la respuesta emocional es por tanto
desproporcionadamente importante. Esta especie de "búsqueda difusa"
de los bancos de la memoria humana a la que el sonido invita, permite toda
especie de encuentros maravillosamente creativos".
Klaus Schöning, director del Estudio de Arte
Acústico de la Westdeusche Rundfunk (WDR) de Colonia, Alemania: "Arte de
la radio, no solo arte en la radio. Vehículo que produce y no sólo que
reproduce". El acto creativo del autor parte de "la confrontación y
combinación del material aparentemente incompatible que, liberado de su
contexto y mediante el collage, se convierte en una síntesis, en una nueva
realidad".
José Igés, artista español: "El
arte radiofónico pone de manifiesto las posibilidades expresivas inherentes a
la radio y, al hacerlo, expande el lenguaje propio del medio".
Ricardo Haye, realizador y docente
argentino: "Pese a que la impronta torrencialmente mercantil de nuestra
radiodifusión mortifica sus capacidades expresivas, tenemos la convicción que
la producción de la radio cabe en las coordenadas del arte. El radio-arte
reivindica la narratividad como práctica discursiva, valora lo cotidiano como
sustento del repertorio temático, pondera el principio de verosimilitud y
también las vastas posibilidades que se abren en las zonas de fractura y
erosión de la realidad"
Si quieren leer más al respecto
les recomiendo el libro de la Doctora Lidia Camacho (2007), “El Radioarte: un
género sin fronteras”, México: Trillas. Contiene un CD con las piezas
mencionadas dentro del libro.